Las drogas depresoras del sistema nervioso central tienen la propiedad de inducir estados de profunda relajación muscular, así como una laxitud de la conciencia y un enlentecimiento a nivel cognoscitivo y de procesos fisiológicos como la respiración o el ritmo cardíaco. A continuación te hablamos sobre cuatro drogas que entrarían en la clasificación de los tipos de drogas depresoras.
tipos de drogas depresoras: una muy común, el alcohol
Las personas beben alcohol para socializar, celebrar y relajarse. El alcohol es uno de los tipos de drogas depresoras más habitual. El alcohol suele tener un fuerte efecto en las personas, y a lo largo de la historia la gente ha tenido dificultad para entender y manejar el poder del alcohol. ¿Por qué el alcohol hace que las personas actúen y se sientan diferentes? ¿Cuánto es demasiado? ¿Por qué algunas personas se vuelven adictas y otras no? El Instituto Nacional sobre el Abuso del Alcohol y el Alcoholismo está investigando las respuestas a estas y muchas otras preguntas sobre el alcohol. Los efectos del alcohol varían de persona a persona, según una multiplicidad de factores, entre ellos los siguientes:
- la cantidad que se bebe
- la frecuencia con que se bebe
- la edad
- el estado de salud
- los antecedentes familiares
Beber demasiado, en una sola ocasión o con el tiempo, puede afectar seriamente su salud.
Así es como el alcohol puede afectar su cuerpo:
en el cerebro
El alcohol interfiere con las vías de comunicación del cerebro y puede afectar la apariencia y el funcionamiento del cerebro. Estas interrupciones pueden cambiar el estado de ánimo y el comportamiento y hacer que sea más difícil pensar con claridad y moverse con coordinación.
en el corazón
Beber mucho durante mucho tiempo o demasiado en una sola ocasión puede dañar el corazón y causar problemas que incluyen:
- Miocardiopatía: estiramiento y caída del músculo cardíaco.
- Arritmias: latidos cardíacos irregulares.
- Alta presión sanguínea.
en el hígado
El consumo excesivo de alcohol afecta al hígado y puede provocar una variedad de problemas e inflamaciones hepáticas, que incluyen:
- Esteatosis o hígado graso.
- Hepatitis alcohólica.
- Fibrosis.
- Cirrosis.
en el páncreas
El alcohol hace que el páncreas produzca sustancias tóxicas que eventualmente pueden conducir a pancreatitis, una inflamación peligrosa e hinchazón de los vasos sanguíneos en el páncreas que impide una digestión adecuada.
cáncer
Según extensas revisiones de estudios de investigación, existe un fuerte consenso científico de una asociación entre el consumo de alcohol y varios tipos de cáncer. En su Informe sobre carcinógenos, el Programa Nacional de Toxicología del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE. UU. enumera el consumo de bebidas alcohólicas como un carcinógeno humano conocido. La evidencia de la investigación indica que cuanto más alcohol bebe una persona, en particular cuanto más alcohol bebe una persona con regularidad a lo largo del tiempo, mayor es su riesgo de desarrollar un cáncer asociado con el alcohol.
Han surgido patrones claros entre el consumo de alcohol y el desarrollo de los siguientes tipos de cáncer: de cabeza y cuello, de esófago, de hígado, de mama y de colon.
en el Sistema inmunológico
Beber demasiado puede debilitar tu sistema inmunológico, haciendo que tu cuerpo sea un blanco mucho más fácil para las enfermedades. Los bebedores crónicos son más propensos a contraer enfermedades como neumonía y tuberculosis que las personas que no beben demasiado. Beber mucho en una sola ocasión ralentiza la capacidad de su cuerpo para protegerse de las infecciones, incluso hasta 24 horas después de emborracharse.
tipos de drogas depresoras: medicamentos depresores
Los depresores del sistema nervioso central de prescripción médica son fármacos que incluyen sedantes, tranquilizantes y medicamentos hipnóticos. Estos medicamentos también pertenecen a los tipos de drogas depresoras. Así tenemos:
- Sedantes: principalmente los barbitúricos.
- Hipnóticos sedantes no benzodiacepínicos
- Tranquilizantes: benzodiacepinas, relajantes musculares y medicamentos ansiolíticos
Estas drogas pueden hacer más lenta la actividad del cerebro, por lo que son útiles para tratar la ansiedad, el pánico, las reacciones de estrés agudo y los trastornos del sueño.
El consumo o el uso indebido de los depresores del sistema nervioso central recetados pueden llevar a un trastorno por consumo de drogas, que en casos graves toma la forma de adicción. El consumo de depresores del sistema nervioso central recetados durante un período prolongado — aún cuando se tomen en la forma indicada por el médico— puede hacer que ciertas personas desarrollen tolerancia, lo cual significa que necesitan dosis más altas de la droga o tienen que consumirla con mayor frecuencia para lograr el efecto deseado.
Un trastorno por el consumo de drogas se crea cuando el uso continuado de la droga causa consecuencias negativas, como problemas de salud o el incumplimiento de las responsabilidades de la persona en el trabajo, la escuela o el hogar, y a pesar de ello el consumo de la droga continúa.
tipos de drogas depresoras: la heroína
La heroína es una sustancia opioide fabricada a partir de la morfina, una sustancia natural que se extrae de la semilla de varias plantas de opio o amapola. Es una droga sumamente adictiva y su consumo tiene repercusiones que se extienden más allá de la persona que la consume. Las consecuencias médicas y sociales del consumo de drogas—como la hepatitis, el VIH y el sida, los efectos sobre el feto, la actividad delictiva, la violencia y los problemas en el entorno familiar, laboral y educativo— tienen un impacto devastador en la sociedad.
Al igual que muchas otras enfermedades crónicas, el trastorno por el consumo de drogas es tratable. Hay medicamentos disponibles para tratar el trastorno por el consumo de heroína y reducir el deseo intenso de consumir la droga y los síntomas de abstinencia, lo que aumenta las posibilidades de lograr efectivamente la abstinencia. Actualmente hay varios medicamentos que se pueden ajustar y adaptar a las necesidades específicas de recuperación de cada persona, al tiempo que se toman en cuenta los trastornos de salud concurrentes. La combinación de medicamentos con terapias conductuales es particularmente eficaz y ofrece esperanza para quienes sufren de trastornos por el consumo de drogas y para quienes los rodean.
tipos de drogas depresorasel ghb
El GHB (gamma hidroxibutirato) es un depresor del sistema nervioso central, por lo tanto entra dentro de los tipos de drogas depresoras. El GHB fue aprobado por la Administración de Drogas y Alimentos (FDA, por sus siglas en inglés) en el 2002 para el <strong>tratamiento de la narcolepsia</strong> (un trastorno del sueño). Su aprobación se dio con serias restricciones, incluido su uso exclusivo para el tratamiento de la narcolepsia y el requisito de un registro de pacientes vigilado por la FDA.
El GHB también es un metabolito del neurotransmisor inhibitorio ácido gamma-aminobutírico (GABA), por ello es un producto natural del cerebro, pero en concentraciones mucho menores que las dosis de abuso.
El GHB se ha usado para facilitar las violaciones, lo que se conoce como «violación con drogas» o «ataque sexual asistido por drogas». Esta sustancia puede ser incolora, insípida e inodora, y se puede agregar a bebidas y hacer que la víctima la ingiera sin darse cuenta.
referencias consultadas
- NIDA. 2018, Marzo 28. Depresores del sistema nervioso central (SNC) de prescripción médica – DrugFacts. Retrieved from https://www.drugabuse.gov/es/publicaciones/drugfacts/depresores-del-sistema-nervioso-central-snc-de-prescripcion-medica en 2021, March 24
- Katherine L. Nicholson, Robert L. Balster, GHB: a new and novel drug of abuse, Drug and Alcohol Dependence. ISSN 0376-8716,
(https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0376871600001915)
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