Este tipo de películas trata en su base y mayoritariamente sobre el proceso por el que pasan todos los adictos a las drogas desde que desarrollan la enfermedad de la adicción hasta que la superan. En este post queremos mostrar el objetivo de las películas sobre adicción a las drogas. Éstas se fundamentan en hacernos ver la realidad sobre el consumo de drogas que se mueven a nuestro alrededor diariamente y las consecuencias que provocan.
Tipos de películas sobre adicción a drogas
Las personas que no padecen la enfermedad pueden conocer el proceso por el que pasan los adictos sumergidos en el mundo de las drogas. Por otra parte, los adictos pueden sentirse identificados y recapacitar acerca de su enfermedad visualizando películas que tratan el tema.
Hay varios tipos de películas sobre las adicciones. Podemos encontrar las que nos cuentan todo el proceso, desde el comienzo de la adicción a cualquier tóxico hasta que ingresan en un centro de desintoxicación, los cuales suelen resultar, tanto en el mundo del cine como en la vida real, bastante efectivos, pues sus protagonistas consiguen lidiar con su enfermedad y superarla. Este es el caso de películas como “Tocando fondo” o “28 días”.
También se nos muestra otro tipo de resultado final muy similar al ingreso, la cárcel. En estos casos los protagonistas acaban en prisión por los distintos delitos cometidos debido al constante consumo de drogas. Estos casos los podemos ver reflejados en películas como “Diario de un rebelde” o “El vuelo”.
Otras más duras, pero igualmente fieles a la realidad, nos muestran cómo la persona enferma no es capaz de superar la adicción a la droga por sí mismo y acaba en muy malas condiciones o falleciendo como es el caso de los films “Ha nacido una estrella” o “El regreso de Ben”.
Películas sobre adicción a las drogas en centros de desintoxicación
Estos proyectos cinematográficos tan crudos se visualizan en tratamientos de desintoxicación con bastante frecuencia, ya que al remover los sentimientos de los pacientes, los ayuda a concienciarse sobre la enfermedad. El objetivo de ver estas películas en el tratamiento de recuperación de la adicción, es hacer que los pacientes se vean reflejados en el papel del adicto y vean desde otro punto de vista su situación real. Con este ejercicio se consigue que el paciente valore los pros y contras de su estilo de vida.
En los tratamientos se procura reproducir la película en varias ocasiones, para que redacten un comentario acerca de la película cada vez que la ven. Con esto se ha podido comprobar que cuando la visualizan por primera vez, ven al protagonista adicto como un compañero de batalla que no tiene culpa de nada y su consumo es racional y comprensible. Pero cuando se les proyecta por segunda o tercera vez a lo largo del proceso de recuperación, se perciben cambios considerables en su forma de ver al protagonista, calificándolo ahora como persona con una enfermedad mental que necesita ayuda para superar la enfermedad. Ya no contemplan el consumo como algo comprensible, sino como algo que hacen para evadir sus sentimientos porque no saben reaccionar ante ellos o gestionarlos sin consumir.
Para las personas que no padecen esta enfermedad es muy difícil comprender la situación de un adicto. Este tipo de películas les ayuda a ver la realidad de esta enfermedad y cambiar su punto de vista hacia los adictos.
Realidad VS ficción
Cuando buscamos en google el concepto “película de adicción a drogas” encontramos muchos proyectos nuevos con diferentes puntos de vista acerca de esta enfermedad. Por desgracia entre estos nuevos proyectos se cuelan algunas películas que quieren hacer creer al espectador que el consumo de drogas puede darles la felicidad. Es el caso de películas como “Lo dejo cuando quiera”.
Esta producción dista mucho de la realidad, ya que en ella nos quieren hacer ver que el consumo y tráfico de drogas puede darnos éxito. Una de las frases más peculiares es “Cuando hacía las cosas bien, todo me salía mal. Ahora que hago las cosas mal, todo me sale bien”. Dentro del contexto de la película, da a entender que, con el tráfico y consumo vamos a obtener nuestra mejor versión. Favoreciendo que las cosas que llevamos a cabo en nuestro día a día vayan mejorando, y poco a poco todo nos vaya resultando más fácil y llevadero, además de ventajoso. Sin embargo, esta no es la realidad, al contrario. Un adicto o traficante (o ambos) nunca va a conseguir sus éxitos a través de la droga. Todo lo contrario, conseguirá cultivar y cosechar sus mayores desgracias si se deja llevar por el consumo.
Influencia en los jóvenes
Lamentablemente este tipo de películas atrae al público más joven, lo que hace que estos chicos y chicas, aun son lo suficientemente inocentes como para no ver los verdaderos peligros de las drogas, se dejan manipular por este tipo de versiones y pueden tener más riesgo de consumir por el simple hecho de buscar nuevas sensaciones. Es decir, por probar si la sustancia es tan amable con ellos como lo ha
sido con los protagonistas de la película.
Las películas sobre drogas están a la orden del día en nuestros cines. Con ellas se consigue una mayor conciencia social entre las personas que no padecen la enfermedad, las que aún no la han desarrollado y las que la presentan. De esta manera quienes no son adictos sienten los problemas de esta enfermedad y ven con otros ojos a los adictos contemplándolos como lo que son: enfermos que necesitan la ayuda del resto de la sociedad. Asimismo, los adictos que no han desarrollado la enfermedad se sienten identificados con los protagonistas. En cierto modo pasan a evitar en la medida de lo posible entrar en contacto con la droga. Igual pasa con las personas que ya padecen la enfermedad y visualizan la película. Así poco a poco estas personas pueden ir alejándose del consumo de sustancias psicoactivas.
En conclusión, señalamos que se debe favorecer las películas que muestran la realidad de la adicción y luchar contra aquellas que ensalzan las drogas.
Deja una respuesta